Amárrate los pantalones y colócate en marcha por Fe

 

Introducción: Dios le dijo a Marta que quitara la piedra más ella sabiendo que detrás de la piedra solo había un cuerpo ya en estado de descomposición por tener ya tres días de haber muerto le respondió señor ya hiede, el señor sabiendo lo que había de acontecer le volvió y le dijo con una palabra más tajante acaso alguna vez no te dije que si crees veras la Gloria de Dios.

 

 

Lectura: Juan 11:21 al 44

Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto.

Más también sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará.
Jesús le dijo: Tu hermano resucitará.
Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día postrero.
Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?
Le dijo: Sí, Señor; yo he creído que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, que has venido al mundo.
Habiendo dicho esto, fue y llamó a María su hermana, diciéndole en secreto: El Maestro está aquí y te llama.
Ella, cuando lo oyó, se levantó de prisa y vino a él.
Jesús todavía no había entrado en la aldea, sino que estaba en el lugar donde Marta le había encontrado.
Entonces los judíos que estaban en casa con ella y la consolaban, cuando vieron que María se había levantado de prisa y había salido, la siguieron, diciendo: Va al sepulcro a llorar allí.
María, cuando llegó a donde estaba Jesús, al verle, se postró a sus pies, diciéndole: Señor, si hubieses estado aquí, no habría muerto mi hermano.
Jesús entonces, al verla llorando, y a los judíos que la acompañaban, también llorando, se estremeció en espíritu y se conmovió,
y dijo: ¿Dónde le pusisteis? Le dijeron: Señor, ven y ve.
Jesús lloró.
 Dijeron entonces los judíos: Mirad cómo le amaba.
 Y algunos de ellos dijeron: ¿No podía éste, que abrió los ojos al ciego, haber hecho también que Lázaro no muriera?
Jesús, profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra puesta encima.
Dijo Jesús: Quitad la piedra. Marta, la hermana del que había muerto, le dijo: Señor, hiede ya, porque es de cuatro días.
jesús le dijo: ¿No te he dicho que si crees, verás la gloria de Dios?
Entonces quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto. Y Jesús, alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído.
Yo sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean que tú me has enviado.
 Y habiendo dicho esto, clamó a gran voz: ¡Lázaro, ven fuera!
Y el que había muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: Desatadle, y dejadle ir.

Lo Primero es la orden del señor.

Dios siempre ha tenido una orden para sus siervo antes de producir cualquier milagro siendo el primer paso en esta etapa de cumplir la orden del señor, la obediencia; Dios le dijo a Adán no comas de esta fruta y el comió aunque termino por acusar a la mujer que el señor le había dado el era más culpable que ella porque ya tenía la palabra y una de las cosas que tenemos que tener presentes es que el señor no tiene dos palabra. Santiago 1:17 Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación.  

Génesis 2:16 Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer…

Génesis 6:14 Hazte un arca de madera de gofer; harás aposentos en el arca, y la calafatearás con brea por dentro y por fuera.

Génesis 12:1 Pero Jehová había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré.

Génesis 22:2 Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré.

Génesis 35:11 También le dijo Dios: Yo soy el Dios omnipotente: crece y multiplícate; una nación y conjunto de naciones procederán de ti, y reyes saldrán de tus lomos.

1ra. de Samuel 15:3 Ve, pues, y hiere a Amalec, y destruye todo lo que tiene, y no te apiades de él; mata a hombres, mujeres, niños, y aun los de pecho, vacas, ovejas, camellos y asnos.

Como puedes ver las órdenes del señor siempre son caracterizados por retos complicados pero la obediencia nos hacen recibir lo que el señor a determinado después de cada proceso

Segundo: Quitar la piedra.
Dios le dijo quita la piedra, la piedra era  lo que estaba en medio para que lázaro se levantara dentro de los muertos y el mundo viera la gloria de Dios. ¿Cuál es la piedra que tienes en medio?
Moisés Dijo
Éxodo 4:10 Entonces dijo Moisés a Jehová: ¡Ay, Señor! nunca he sido hombre de fácil palabra, ni antes, ni desde que tú hablas a tu siervo; porque soy tardo en el habla y torpe de lengua.
(R)Éxodo 4:11 Y Jehová le respondió: ¿Quién dio la boca al hombre? ¿o quién hizo al mudo y al sordo, al que ve y al ciego? ¿No soy yo Jehová?

8 de los 10 espías dijeron.

Números 13:31 al 33 Más los varones que subieron con él, dijeron: No podremos subir contra aquel pueblo, porque es más fuerte que nosotros.

 Y hablaron mal entre los hijos de Israel, de la tierra que habían reconocido, diciendo: La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra que traga a sus moradores; y todo el pueblo que vimos en medio de ella son hombres de grande estatura.

También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, y éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos.

Tercero: Quitarte la venda.

La venda es una ceguera espiritual la que cegó a Saúl que decidió someterse a los hombres que tenía al frente antes que obedecer a la vos de Dios quien lo llevo a ser Rey de Israel, la palabra del señor dice. Salmos 49:20  El hombre que está en honra y no entiende,
Semejante es a las bestias que perecen.

La venda espiritual no te deja ver

2da. de Reyes 6:17 Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros de fuego alrededor de Eliseo.

La ceguera nos hace incrédulos.

2da. a los Corintios 4:4 en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios.

Se necesita soltar las vendas que nos atan y no nos dejan caminar.
Juan 11:44 Y el que había muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario. Jesús les dijo: Desatadle, y dejadle ir.
El señor no necesitaba estar sin la venda para saber quién era quien lo golpeaba, pero para nosotros con los ojos vendados tropezamos y golpeamos porque no podemos ver con claridad lo que esta delante. Lucas 22:64 y vendándole los ojos, le golpeaban el rostro, y le preguntaban, diciendo: Profetiza, ¿quién es el que te golpeó?
Es un reto querer servir al señor esta mujer había mando a buscar al señor por la enfermedad de su Hermano más el señor se detuvo en el camino a esperar que muriera lázaro para después llegar y que el nombre del señor fuese glorificado a través de este milagro hecho en la vida de lázaro esto para marta era un retraso del señor ella le dijo si hubieses llegado antes no hubiese muerto, la palabra dice que el señor se apartó y lloro ahora ¿Por qué lloro? ¿Por el muerto? La biblia dice que lloro por la incredulidad del pueblo ya hacía mucho tiempo que estaba haciendo milagros entre ellos y todavía no le creían.
Cuantas son las beses en las que has visto la mano de Dios moverse en ti y cuantas han sido las veces en las que has dicho tengo fe pero no veo nada, sin tomar en cuenta que eso dice la biblia que es la certeza de lo que se espera la convicción de lo que no se ve; Una cosa es decir tengo fe y otra es amarrarse los pantalones como los buenos y comenzar actuar, Dios le dijo a Abraham cuenta las estrella del cielo si logras hacerlo así será tu descendencia sin número como la arena del mar, esto me recuerda que cuando era un niño salía a competir con mis Hermanos quien encontraba primero lo que se llama las 7 cabrillas y abecés contábamos que habían 5 otra 10 y una vez mi hno.  Conto 20 ¿pregunto cuál sería la historia si él le dice eso no se puede mándame hacer otra cosa que no sea esa? Así como muchas veces le hemos dicho nosotros.