En la nación del sol naciente, Frozen ha conseguido la misma popularidad que en el resto del mundo, por lo que no se explica que una pareja esté atravesando por un momento tan difícil luego de ver una película que transmite los valores tan necesarios como el amor, la amistad y el sacrificio.
Ante la incansable insistencia de su esposa para ir al cine a ver el film, el marido decide ceder de mala gana y complacerla. Al salir de la proyección el hombre no sintió que su vida hubiese cambiado, ni que los pájaros cantaran, ni que sus problemas se resolvieran, por lo que ingenuamente le preguntó a su mujer: “¿De verdad te parece tan buena?”
Ante tal frustración, la mujer que es fanática de la historia, le dio un Ultimátum: “Si no puedes entender lo que hay de genial en esta película, algo no funciona en ti como persona ¡Quiero el divorcio!”
Según cuenta el impactado marido la relación nunca había tenido problemas en seis años, por lo que no termina de creer que por una trivialidad así puede terminar con ella, pero el caso es que desde aquella discusión ella vive en casa de sus padres.
Con información de ABC.
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